Luego de la devolución pasada decidimos cambiar de personaje, y volver con una idea que tuvimos que descartar para la vez pasada por tema de tiempos.
Esta vez nos encontramos con Sebastián, y el interés estaba en armar algo con el mundo Drag Queen, o relacionado a los aspectos considerados femeninos en relación al arquetipo masculino.
La consigna que nos pusimos fue la de generar un encuentro con este otro lado "femenino". Y buscar cuando ella no estaba presente, es decir cuando Sebastián estuviera sin montar, sus huellas, las marcas de su ausencia.
Para ello, primero tuvimos que habilitar ese juego de vestirse de diva, de habitar lo que se considera femenino, entregarse a este juego y dejar ser esa otra facción de Sebastian.
Y sin darnos cuenta nos dejamos llevar en esa vorágine de lo repentinamente habilitado, nos vimos con la libertad de jugar con todos los estereotipos de feminidad, los tres. Viendo las fotos al principio me preocupaba que se interpretase como una suerte de burla. Intente descartarlas y quedarme con las que considero más "serias", pero hay algo de estas otras que me hace volver una y otra vez a verlas, algo que hace que me gusten más. Estas otras fotos, más delirantes, más lúdicas, tienen algo más genuino en el sentido de lo documental, no creemos que sean burlas sino que son documento de un momento de libertad absoluta, una expresión muy genuina del disfrute que hay cuando podemos soltar un poco ese deber ser, y jugar con lo que no siempre está permitido socialmente. En estas fotos nos encontramos con un Sebastian diferente, mucho más suelto, en constante disfrute y sonrisas. Entre los tres pudimos explotar al máximo los conceptos de feminidad, desde el vestuario hasta el contexto en el que se encontraba. Y al momento de contraponerlo con su lado “masculino” nos dimos cuenta que esas fotos no aportaban mucho, creímos y decidimos entonces retratar dentro de este marco de la feminidad las aristas más relacionadas a la diversión, al dejarse llevar, y las aristas más profundas en las que él se observa.
(A continuación las de mi compañera Agostina). |
Por otra parte estas son las fotos que consideramos más “serias”, o mas parecidas a la primera intención que tuvimos con nuestro trabajo sobre contraponer los aspectos del “femenino” y “masculino”, pero que creemos que no representan tan bien lo que nos paso en el proceso, ni que hablan de lo que nos interesó de dejar que sebastián explore en el mundo del estereotipo femenino.
Por último, en el juego de las preguntas, Sebastián dijo que si fuera una fruta sería una pera, si fuera un genero musical sería swing o cumbia, y si fuera un lugar seria centroamérica.
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